¿Perla Mabe o ampolla cultivada? Una perla es una concreción de aragonito y/o calcita biomineralizada con materia orgánica menor (conquiolina) producida dentro de un saco perlado en el interior de moluscos marinos o de agua dulce. Una perla cultivada es básicamente lo mismo, pero formada con intervención humana dentro de un saco de perlas cultivadas. Sin embargo, las llamadas "perlas mabe" no son técnicamente perlas en el sentido de que no crecen dentro de un saco de perlas. En realidad, se trata de protuberancias en el interior nacarado de la concha que se forman como consecuencia de un proceso de cultivo, definiéndose como ampollas cultivadas, que se labran, cortan de la concha (se eliminan los núcleos blandos), se rellena el interior con una sustancia endurecida y se terminan con un capuchón de nácar pegado a la base, lo que lo convierte en un producto ensamblado, por lo tanto, una ampolla cultivada ensamblada. El nombre “mabe” proviene de la lengua vernácula japonesa para pingüino Pteria (mabe-gai), una ostra perlera que se usó ampliamente para producir estas ampollas cultivadas. En las imágenes, un collar de perlas cultivadas en cuentas, un surtido de ampollas cultivadas, un colgante y uno todavía en la concha, cultivados en la ostra perla de labios arcoíris o “ostra nácar” (Pteria sterna) en Guayamas, Golfo de California. México © Perlas del Mar de Cortez
Fuente: Rui Galopim de Carvalho / Portugal Gemas Academy